viernes, 21 de mayo de 2010




No creo que me puedas hablar de soledad
si en la oscura cámara aun se puede escuchar
el eco de esa tierna melodía
que me daba alegría en la oscuridad de un viejo mediodía,
el tiempo está enfermo agoniza bajo tierra
y la guerra es el arma que prohíbe mi cuaderno
pero baño mis ojos en la nostalgia del ayer
sin poder ver el color del nuevo amanecer.
Vivo mis dolores en castillos de arena
el cristal en mi piel el alma me gangrena,
los rostros pintados en el suelo sin colores
son la mancha de un mundo que sufre mal de amores
aunque llores, las lágrimas nunca son alvio
del tibio frío que te recorre en los albores,
y aunque debores imágenes del tiempo urgente
sigue la señal de tu corazón siempre latente.
Y es que el hielo de tu ausencia es como una espada
clavada a traición y de culpa destilada...
mi voz solo vive en la felicidad de un destello
recordando los caminos que dibujó en tu cuello,
por ello ahora ando en un mundo imaginario
dónde todos mendigamos para llegar a tus labios,
ni los savios ni los ricos llegan a este mar
y las olas traen trozos de luna como manjar,
y entre mis anhelos rudos otros astros piso,
guardando todas las llaves que contienen el secreto,
el pincel es amuleto del paisaje que diviso
porque en un lienzo pinto nuestro propio paraiso
aunque solo vivamos ahora ya en una utopía
pido misericordia para que llegue ese día
sediento del dulce licor, con pavor a la amnistía
sin musa, sin ojos, muerto y sin poesía.
El pergamino del olvido está lleno de nombres
y yo solo busco de tus besos la ambrosía,
no te asombres si recito el escrito de letanías
soy preso y beso las cadenas de tu tiranía.
Y me siento más hundido que el reino de pompeia
la lava corre en mi como un grito a granel
en nuestra epopeya el cielo es un grAN burdel
de oro y miel, pero solo tu, TU! eres mi estrella.
Tu te has ido lejos! tan lejos de mi...
un universo de distancia y un telón sin fin,
nuestras palabras oxidadas ligeras como serrín
y las hadas y las ninfas volaron de mi jardín.
Vago sin dinero, y con unos cuantos versos,
que saldan la cuenta con mi melancolía,
la ciudad está tan fría y todo son adversos
y diversos lamentos atentan a mi dinastía,
Perdí el norte sin tus ojos, perdí el faro
perdí el cielo rojo, y anduve en un acantilado
anduve en un funeral en busca de mi afrodita
bajo el castillo medievaly arriba de la hermita.
ahora me dices que el odio es tu compañero
no hubo ni un te quiero falso en nuestro episodio
no vio el podio de amor tu deseo vanidero
o me mostraste una máscara de cariño rastrero.
yo solo digo que te quiero te quier te quiero
no hay amor más grande en el mundo entero,
y esto que escribo no es un adios ni nada así,
es lo que diría si tu te fueras de mi.


GEnísss

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